La muerte es la peor manera de despedirse. Es dolorosa, angustiante y por lo regular viene acompañada de sudores, cansancio, silencio y olor a fármacos.
La muerte no da tregua: llega, saluda y se va, así de rápido. Lo peor es cuando se siente cómoda y pide un café para saludar a cada uno de los visitantes y puede pasar días, meses o años instalada sin decir a qué hora se va a ir. Me recuerda al primo Marcelo que nomás ver que tocaba a la puerta, sabía que tendría la obligación de sentarlo a la mesa, ofrecer una cerveza y esperar a qué maldita hora concluía su visita.
Es tan hija de la chingada que una vez decidida regala un poco de su perfume a los futuros deudos, por aquello de que si alguna vez les toca la visita de la señora esta, la recuerden con un poco de complacencia. Ni qué decir de su prima Angustias, es la peor de la familia.
La prima Angustias se quedó soltera. Es blanca, y la muy blanca viste siempre con un vestido azul, en el que asoma el corpiño de encaje simpre en la parte de atrás. No sé porqué siempre usa un sweter clor marrón con un kleenex usado en la manga. No huele mal, mas bien no huele a nada. La prima Angustías siempre acompaña a la muerte, de hecho, en las citas que hacen es la que peor cae, pues no habla ni consuela... sólo se queda ahí mirándote. En lo particular creo que si la muerte no llegara con esa nefasta acompañante, la visita sería más amena.
Hace unas semanas, y sin avisar llegaron a casa de mi madre. Por un momento pensé que sólo sería un recordatorio, como esos que dejan la compañía de gas o la de la luz, pero no. La factura estaba vencida y no habría reconexión.
Bah.
Así llegó y así se fué. Rápido sin explicar nada, tal vez tenía prisa y su agenda estaba saturada. Pregunté quién sería el responsable de la organización de su cuaderno negro de piel y nadie me supo responder. Busqué en internet alguna referencia para pedir explicaciones y no encontré nada.
En fin. A mi madre alguna vez le di la dirección de esta página... no sé si donde está tengan conexión, pero sólo me queda decirte algo que la pinche muerte y su prima no me dejaron que escucharas.
Gracias Má... siempre.
PD: Muerte: te pido que la siguiente vez que se te ocurra visitarnos, mandes a una misión internacional a tu prima Angustias. Mira, es probable que Bush, Fox, los pederastas e incluso la selección de futbol de EUA la reciban con cariño.
